Hay gays en Palma con más pluma que un matrimonio entre un edredón nórdico y un avestruz. Por supuesto son mega fanses de Madonna, Kylie Minogue y Lady Gaga. Si fuesen ricos serían unos fashion victims imposibles pero como son simples asalariados se pasan el día metidos en Zara, H&M, Strafalarius y Bershka. En la cama son lo más parecido a una mujer femenina y muy señora…de su entrepierna. Se tragan todos los programas del corazón. Adoran a Julie Andrews y uno de los eventos más importantes del año para ellos es el concurso de Eurovisión, of course. ¿A cuento de qué viene todo este rollo?
La mayoría de estos mozos afirma que en su casa sus padres no saben NADA de su homosexualidad. Una de dos: O mienten más que hablan o resulta que sus padres son un ficus y un sauce llorón. Hay que ir con cuidado con los ficus porque aunque no hablen se enteran de todo y si pudiesen te darían con su rama más grande en la cabeza por mamarracha y no te digo nada del sauce llorón; te acercas a él pero no le ves llorar y es que los sauces lloran en la intimidad, son muy discretos para eso…como las madres.
Cuando te los encuentras por la calle te dan la mano y es que si te dan dos besos y “alguien” les ve aquello sería su mayor desgracia. Nadie les ha explicado que besarse no es lo mismo que un morreo ni una felación o un fist fucking, que simplemente es una manera de saludar. Y como los susodichos trabajen en un lugar rodeado de gente siempre temen que alguien les vea y puedan sacarles del armario…
¿¿Pero cómo les van a sacar del armario al que nunca han entrado?? Además si tan en secreto lo llevan ¿Por qué salen de fiesta por Gomila cada finde y encima se dejan hacer fotos que luego van a ser publicadas en cualquier blogucho de homosexuales o en el Facebook de alguna cacho perra?
Cari, “relax, take it easy” y disfruta