Chumina Power y las señoras rancias del PP

Esta semana ha traído cola la visita de Ayusita a Chueca, en donde la transformista Chumina Power, empresaria y dueña del LL le ha hecho de anfitriona y de paso se ha sumado a su campaña. Como era de esperar la visita a Chueca sólo convocó a los periodistas y poco más no fuera cosa que le saliera el tiro por la culata como a Abascal en Vallecas.

Lo de la transformista-empresaria haciéndole pinkwashing a la socia de VOX, a los que quieren imponer el pin parental en Madrid, los que quieren acabar con el Orgullo, los que quieren retirar la subvención al Observatorio contra la LGTBIfobia, los que quieren derogar la ley de Matrimonio Igualitario, están en contra de la Ley Trans y acabar con todas las asociaciones LGTBI es muy pero que muy de vómito. Esta señora con peluca que no se representa más que a sí misma está encantada y feliz con el gobierno del PP porque le han dejado abrir su bar y hacer caja. A la tal Chumina Power le da exactamente igual si su clientes se mueren de Covid, le da igual si a las trans le hacen la vida imposible desde las instituciones, le da igual que los niños y niñas crezcan sin la posibilidad de recibir educación en la diversidad y sexual, le da igual si desaparecen las asociaciones LGTBI porque ella ya no las necesita (o eso cree), le da igual vivir en un entorno hostil mientras a ella le dejen hacer caja y vivir en su burbujita que es Chueca. A ella los gays, lesbianas y trans de Orcasitas, Vallecas, Carabanchel o el barrio de Salamanca le importan tres pepinos mientras vayan a su bar a dejarse los cuartos aunque cuando salgan de ahí les den una paliza  ¡¡Un asco!!

Por otro lado el titular de EL INMUNDO en el que la candidata popular reduce lo de ser gay, bi o lesbiana a lo que haga unx en la cama es lo más rancio, LGTBIfóbico y asqueroso que se pueda leer. Señora Ayuso mi marido y yo somos gays rematados las 24 horas del día y los siete días de la semana. Nuestro gayerismo se apodera de nosotros desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. Reducir nuestro matrimonio a un mete-saca polla-culo es un insulto a todo el colectivo, a tantos años de lucha y a la dignidad de tantas personas que se han partido la cara por conseguir los derechos de los que hoy disfrutamos y los que usted y sus amigas de VOX nos quieren arrebatar.